A los pocos meses de comenzar a estudiar japonés por cuenta propia (y darme cuenta del berenjenal en el que yo solito me había metido) empecé a interesarme por aquellas palabras que son fonéticamente muy similares en ambos idiomas, y jugar un poco con su semántica sin ninguna relación.
Curiosamente, hay muchas similitudes fonéticas con palabras políticamente poco correctas. Por ejemplo, algo que muchos ya saben es que los insultos más comunes en japonés son "baka" (馬鹿、ばか) y "ahō" (阿呆、あほう, la 'h' en japonés suena aspirada, casi jota). O que al muy ilustre Miguel de Cervantes Saavedra se le conoce como el coño de Lepanto (まんこ, manko). Por no hablar de que los brindis a la española les suenan un poco a pilila (ちんちん, chinchin).
Curiosamente, hay muchas similitudes fonéticas con palabras políticamente poco correctas. Por ejemplo, algo que muchos ya saben es que los insultos más comunes en japonés son "baka" (馬鹿、ばか) y "ahō" (阿呆、あほう, la 'h' en japonés suena aspirada, casi jota). O que al muy ilustre Miguel de Cervantes Saavedra se le conoce como el coño de Lepanto (まんこ, manko). Por no hablar de que los brindis a la española les suenan un poco a pilila (ちんちん, chinchin).
En el que nunca había caido, y no carece de cierto ingenio, es el que me dió a conocer Yasu-kun, alguien a quien pude conocer allí y me ayudó muchísimo durante el tiempo que estuve. Y es el que sigue. Las empresas panificadoras más populares de España son "Bimbo" y "Panrico". Curiosamente el adjetivo "pobre" (no de lástima, sino de escasos medios económicos) en japonés se dice binbō (貧乏, びんぼう). Es decir, que la competencia más dura con el pan de molde en este nuestro país se da entre el "pan rico" y el "pan pobre".
Ignoro cuál de las dos empresas factura más, pero no deja de ser una coincidencia graciosa, ¿verdad?